viernes, 28 de septiembre de 2012

EL APEGO INFANTIL (Visto de la óptica como padres, madres y maestras que atienden niños y niñas en edad inicial)


 Autora: MSc. Jersomina Sucre Morao Orientadora Conductual.
E-mail:minasucrem@yahoo.com

En el artículo anterior, se hacia mención del apego sano o Improntación. En este apartado se hablará del apego infantil como una relación afectiva entre la madre, el padre que atiende afectivamente a su hijo o hija en edades neonatales, infantes 0 a 3años donde se afianza el apego sano, que posteriormente le ayudará a  adaptarse a cualquier ambiente social, ser independiente y autónomos en sus actuación. Para Walter Riso (2006) existen varios tipos de apego que a continuación se mencionan y explican:  
  1. Apego seguro
  2. Apego inseguro/evasivo,
  3. Apego ansioso/ambivalente

Es por ello, que las maestras que atienden niños y niñas en edad maternal requieren conocer estos tipos de apego para ir canalizando la adaptación y proceso de integración desde las edades más tempranas hasta su ingreso al nivel de preescolar. Además, es muy importante que  haya adquirido con éxito en su estructura emocional un apego seguro mantenido en el tiempo tanto por parte de sus progenitores (papá y mamá) donde el vínculo afectivo es vital en el apego seguro.

En aquellos casos, que los niños y niñas que no hayan pasado por grupos anteriores ni por el nivel maternal; las maestras tendrán que estar pendientes en el Proceso de Integración de cómo se comporta el niño o la niña en el aula y fuera de ella. Como es la relación con los(as)  otros(as) niños(as) con los adultos significativos, su forma de expresarse verbal, gestual y corporalmente, la forma de jugar en el espacio de representar e imitar es esencial pues allí representan roles significativo del hogar, del contexto social que le circunde y hasta la forma natural de exteriorizar sus sentimientos y emociones hacia otros niños y niñas.

También, en los diferentes momentos de la jornada diaria los niños y niñas pueden manifestarse afectuosamente o no con las maestras y es un indicio de que tipo de apego expresan. Por ejemplo aquellos niños y niñas que tiene un apego seguro suelen ser más sociables con sus compañeros de clases, obedientes, cooperadores, seguros de sí mismo, autónomos y con el tiempo tendrán la menos probabilidad de desarrollar problemas de conductas o emocionales  en aquellos niños y niñas que manifiesten apego inseguro/evasivo, ansioso/ambivalente (resistente).

Se preguntarán ¿Qué hacer en el caso de estos niños y niñas que presenten apegos inseguro/evasivo y/o ansioso /resistente? Primero estar atento a que estilo de crianza (disciplina, normativas, escala de valores, entre otras) prevalece en el hogar pues será un gran indicio de cómo se maneja la autoridad y el afecto y por ende como se da la relación de apego en los niños y niñas con sus padres y responsables en la medida que crecen. Porque en el aula las maestras también ponen su cuota de responsabilidad al ejercer la autoridad y afecto con el grupo de niños y niñas que atienden a diario. Así, ambos estarán a contribuyendo en la formación integral de una personalidad en el niño y niña al cumplir los 6 años de edad.¯

lunes, 10 de septiembre de 2012

Psicología para padres de niños y niñas en edad inicial


ESTRATEGIAS CONDUCTUALES PARA EL MANEJO OPERATIVO DE  CONDUCTAS DESADAPTATIVAS EN EL PROCESO DE INTEGRACIÓN DE NIÑOS Y NIÑAS EN EDAD INICIAL.                                                                          

Autora: MSc. Jersomina Sucre - Orientadora de la Conducta.
E-mail:minasucrem@yahoo.com 

El Proceso de Integración tanto en el Nivel Maternal como en el Nivel de Preescolar es un periodo crucial en muchos niños y niñas que ingresan a las diferentes instituciones educativas de educación inicial en toda Venezuela. Para ello, implica una disposición abierta, afectiva de entendimiento, motivación y mucha creatividad por parte del personal de maestras en el recibimiento y atención del grupo de niños y niñas. Tomando en cuenta, la edad, las características personales, sociales y emocionales que suelen manifestar conductualmente.

Además, durante el proceso de integración, los y las infantes suelen manifestar conductas adaptadas como desadaptativas como lo son los berrinches, las pataletas gestos y acciones agresivas como también timidez, mutismo, llanto recurrente y aislamiento. Sea cual sea, el caso el personal de maestras, directivos, padres y responsables deben considerar este tipo de conducta pues, son de cuidado pues afecta el desarrolló psicosocial adaptativo de los niños y niñas en edad preescolar.

Por eso, muchos padres, madres, maestras, directivos se han preguntado ¿Por qué hay niños y niñas que se adaptan con facilidad mientras que  otros les cuesta más integrarse a las actividades grupales y/o a la rutina diaria? Porque hay niños y niñas que presentan apego sano o Improntación que para Hess (1973) lo define como “el proceso en que se da un apego sumamente rápido, durante cierto período critico, de una pauta conductual innata hacia ciertos objetos que más tarde se convierten en importantes productores de la pauta de conducta en cuestión.” (p.87) Así, los niños y niñas se van identificando con sus progenitores y con adultos significativos en este caso las maestras de educación inicial por las atenciones, su forma de hablarles hace que ellos y ellas adopten posturas que transmiten confianza, seguridad y afectividad permaneciendo en los recintos escolares hasta que uno de los padres y/o responsables vengan a buscarlo a la hora de la salida.


Por otro lado, las maestras y adultos significativos en el proceso de integración pueden emplear algunas técnicas conductuales para manejar operativamente las siguientes conductas:
Para berrinche y pataletas se encuentra la técnica de extinción que es útil para suprimir o extinguir una conducta inadecuada. Pero, el mantenimiento de esta dependerá en gran parte de los resultados que genere. Por ello, es imprescindible que tantos padres, madres, responsables y maestras tengan la fortaleza de no ceder ante la conducta manipulativa del llanto, pataleta y berrinche del niño o niña. Así mismo, diríjase hacia el niño o niña con calma y firmeza: <<Un momento. No arrojes, ni empujes, ni golpee nada>>. Por lo tanto, al principio llorara una hora, luego media hora hasta que vaya disminuyendo la frecuencia y este se dará cuenta que con el llanto no consiguió el cometido y dejará de llorar y poco a poco se irá integrando a las diferentes actividades del grupo y a la rutina diaria. Además, cuando el educando manifieste una conducta adecuada la maestra le prestará atención y con elogios sociales (palabras, gestos afables, abrazos afectuosos) reforzará positivamente. Entonces, se le dirá: <<Me place saber que ahora te sientes mejor. Estabas muy enojado(a), lo sé. Sin embargo, a mí no me gusta que grites; por lo tanto, tuve que dejar de escucharte>> con estas palabras, se dará cuenta el infante que cada vez que se comporte adecuadamente el adulto le atenderá. 
El reforzamiento positivo es una técnica para el mantenimiento de la conducta adecuada que puede darse a través de elogios consumibles (caramelos, chupetas, galletas) como elogios sociales (abrazos, besos palabras afables). Lo que si es importante, es no caer en el abuso del uso excesivo ésta técnica pues perderá el efecto deseado en los educandos.
El tiempo y fuera es una técnica mal empleada por todos los maestros y maestras no solo en el subsistema de educación inicial sino también en el subsistema de educación primaria. El tiempo fuera o descanso obligado, es una técnica disciplinaria en la que el niño o niña debe permanecer en un lugar determinado por un período dado. Es muy útil cuando presenta conducta en destruir objetos, pegar a otros niños y niñas o provocar la ira del adulto. Se le pide al niño o niña infractora que no lo haga más, pero si no obedece usted le dirá: acompáñame a la otra habitación (llámese cuarto de descanso, un pasillo seguro,  un lugar aparte del aula) y donde usted lo pueda dejar solo sin objetos distractores ni que pueda arrojar, es decir aburrido para él o ella. Es importante mencionarle al niño o niña  el motivo de la suspensión y el tiempo de que estará allí. Recomiendan un minuto por cada año de edad, es decir si el niño tiene 5 años entonces será el descanso obligado de 5mtos. Pasado el tiempo del reloj se retirara del sitio, se le pregunta ¿como te sientes? ¿Pensaste? ¿Qué piensas hacer ahora? para luego, incorporarlo a las actividades ordinarias. ϕ